Quienes somos

Trabajamos para un clima interior saludable

Las personas anhelamos el bienestar. Si hablamos de climatización, ya en el antiguo Egipto se desarrollaron sistemas para combatir el calor. Miles de años después, en DECKE seguimos buscando lo mismo, pero vamos mucho más allá.

Hoy ya no es suficiente satisfacer las necesidades de confort, sino que debemos hacerlo de acuerdo a los criterios de sostenibilidad que vertebran la agenda 2030. Es nuestra responsabilidad dotar a nuestros clientes de un sistema de climatización saludable. Movilizamos agua en lugar de aire, lo que previene las afecciones respiratorias provocadas por los ácaros y gérmenes que acompañan a menudo al aire acondicionado convencional y que proliferan en los edificios enfermos. Éste es nuestro primer compromiso: un aire limpio, no filtrado, sano.

Quienes somos

Decke Health Clima

Nuestra otra gran responsabilidad es con el planeta. Según un informe de 2018 del Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente (UNEP según sus siglas en inglés) «con más de 1.600 millones de aparatos de aire acondicionado en servicio, desde 2015, la refrigeración de espacios es responsable de más del 15% del aumento en la demanda de electricidad en todo el mundo.»

El calentamiento global nos indica que la climatización podría ser pronto poco menos que imprescindible, pero deberá ser sostenible. Por ello, en DECKE optamos por un sistema de radiación térmica nacido de la biomímesis. La naturaleza, esa gran maestra de la eficiencia, es la inspiradora de nuestra red de pequeños tubos capilares que transportan agua por cualquier paramento. Igual que ocurre en el ser humano, los edificios que incorporan nuestra tecnología regulan su temperatura con el mínimo gasto energético. Gracias a que el agua conduce la temperatura con un 10% del coste de los métodos tradicionales, sólo es necesaria una fluctuación (y por tanto, un gasto) mínimos para que las estancias se autorregulen y sean totalmente confortables en cualquier época del año.

Por último, DECKE permite a los arquitectos una total libertad a la hora de diseñar edificios. Con una instalación de tan sólo 9cm en los paramentos, el ahorro de espacio frente a los conductos de ventilación es considerable. Además, el arquitecto puede olvidarse de los condicionantes de radiadores, bombas de calor, rejillas y otros elementos incómodos y poco estéticos. En la naturaleza, el aire puro se percibe. No podemos verlo, tocarlo ni escucharlo, pero se siente. En DECKE logramos lo mismo para tus edificios.

firma-decke

¿Hacemos juntos tu próximo proyecto?

Escríbenos unas líneas, y nos ponemos en contacto contigo.
Primera consulta gratuita.

    Scroll al inicio
    Quiero hablar con vosotros para aclarar algunas dudas ...
    //
    DECKE
    ¿Podemos ayudarte?