Trabajamos para un clima interior saludable
Las personas anhelamos el bienestar. Si hablamos de climatización, ya en el antiguo Egipto se desarrollaron sistemas para combatir el calor. Miles de años después, en DECKE seguimos buscando lo mismo, pero vamos mucho más allá.
Hoy ya no es suficiente satisfacer las necesidades de confort, sino que debemos hacerlo de acuerdo a los criterios de sostenibilidad que vertebran la agenda 2030. Es nuestra responsabilidad dotar a nuestros clientes de un sistema de climatización saludable. Movilizamos agua en lugar de aire, lo que previene las afecciones respiratorias provocadas por los ácaros y gérmenes que acompañan a menudo al aire acondicionado convencional y que proliferan en los edificios enfermos. Éste es nuestro primer compromiso: un aire limpio, no filtrado, sano.